Páginas

15 de marzo de 2013

Ángel Santiesteban responde a Habana Times

En mi respuesta al comunicado “8 de marzo: tod@s contra la violencia”, campaña de solicitud de firmas contra la violencia de género que aprovechando el supuesto delito que se me imputa lanzaron desde La Habana Sandra Álvarez, Marilyn Bobes, Luisa Campuzano, Zaida Capote Cruz, Danae Diéguez, Laidi Fernández de Juan, Lirians Gordillo Piña y Helen Hernández Hormilla no sólo dije que era inocente.
He dicho mucho más a cuanto medio de expresión me ha dado la oportunidad de ser todo lo enfático y explícito que ameritan los hechos en los cuales se me implica. Pero sabiendo que quizás no bastaría con mí palabra, busqué ayuda además del contundente video que demuestra con absoluta claridad mi inocencia. Hice más: entrevisté en presencia de un testigo al primer oficial Instructor del caso. Este no se acordaba de mí, tuve que recordarle algunos datos y, luego que recordara, se sorprendió de que aquel archivado expediente se hubiera retomado, y que además se hubiera retomado a sus espaldas.
Le relaté los hechos y su reacción fue de total sorpresa. Le hablé sobre la versión de la denunciante acerca de una violación sexual y me dijo que la primera noche en que ella se presentó ya tenía el certificado médico. Él la envió con un policía al médico, pero el nuevo certificado no arrojó los daños que aparecían reflejados en el primer certificado que ella traía, y en cuanto a la violación, apenas ella lo insinuó, el Instructor le dijo que la llamarían a Medicina Legal y ella se negó. Fue entonces que la denunciante decidió cambiar la versión.
Mientras este primer Investigador estuvo fuera del caso para pasar un curso con el cual ascendería a teniente, otro oficial había retomado el expediente en mi contra y la denunciante volvió a relatar la supuesta violencia sexual y omitió decir que el primer Instructor le había informado sobre las pruebas de Medicina Legal y que ella se había negado y había cambiado su versión.
Cuando este oficial Instructor regresó a sus funciones y leyó en mí computadora la declaración que la denunciante había hecho ante el nuevo Instructor que había retomado el caso, montó en cólera y me pidió que lo presentara en el juicio como testigo de la defensa.
La denunciante ha mentido a diestra y siniestra en todo lo que no le conviene, ya no solo en mí contra, pues sus declaraciones entran en contradicción con lo que ella misma le declaró al primer Investigador.
Fue mi abogado quien decidió no presentar a este oficial como testigo de la defensa, pues lo creyó innecesario, ya que con los testigos y las pruebas que presentamos, y analizando los débiles pruebas de la Fiscalía, era evidente nuestra considerable ventaja.
Como se pudo comprobar en el acto oral y luego en la sentencia y recurso de casación, jamás mi condena ha dependido de pruebas y de un serio análisis jurídico. La cantidad de irregularidades y violaciones de los presupuestos policiales y jurídicos hace más que evidente la venganza del Gobierno.
Aún pudiera entender a los que viven dentro de la isla, puesto que no poseen los medios de informarse. Algunos los tienen, pero esos jamás dirán algo en contra del proceso, por las siempre temidas consecuencias; pero aquellos que viven en el exterior, que poseen la vía para informarse, y ver al flamante “testigo” de la Fiscalía relatando la verdad de todos los hechos: cómo fue sobornado, presionado para testificar en mi contra, tienen ahí una evidencia rotunda de lo que se esconde detrás de este proceso.
No pregunten por mí inocencia, véanla ustedes con sus propios ojos. Comunico un detalle: el testigo, después de verse filmado y cuando ya el video ha sido hecho público, fue visitado por la denunciante y acompañado por esta a la Unidad Policial para que me acusara de “amenaza” y volviera a mentir diciendo que el video había sido grabado bajo esa amenaza, por lo cual se me abre otra causa de “atentado”, ya que supuestamente yo había amenazado a un testigo de la Fiscalía. Pero gracias a la respuesta de los peritos policiales, se determinó que el video es original, no está editado ni manipulado y que el testigo no se encuentra amenazado. Le recomiendan entonces al Investigador profundizar en las declaraciones, lo que hace más evidente que valoraron que yo tenía la razón y el testigo era manipulado en sus declaraciones en mí contra.
No digo nada que no puedan ver en Internet. Hemos puesto allí muchas cosas para demostrar mi inocencia. Sin embargo, nadie tiene acceso a las acusaciones de la Fiscalía pues sería muy fácil entonces que cualquiera descubriera las irregularidades del proceso, las contradicciones de las declaraciones de la denunciante y del supuesto testigo.
A mí me defienden las pruebas. Por eso insisto: insto al Gobierno, que es el verdadero Fiscal en este proceso, que presente alguna prueba en mí contra que no sea mi letra inclinada. 

Ángel Santiesteban Prats
Prisión La Lima.
Guanabacoa. La Habana

1 comentario:

jpablo dijo...

Yoss no fue nunca llevado a juicio por acoso a ninguna estudiante de Letras. Yoss fue sancionado como miembro de la UNEAC, mas no por causa de dicha estudiante, sino porque su cuento dejaba malparados a varios escritores, refería los chismes y las puñaladas traperas entre escritores.